Día de la Madre, dia de la madre

Los Diez Mandamientos para la Madre

Este mes estamos homenajeando una madre mencionada en la Biblia que tuvo gran influencia en la historia de todo un pueblo a través de sus hijos. Si quieres saber más sobre ella, leer nuestra publicación: Jocabed

Tengo tres hijos; una de ellas es una joven adulta (22-26 años). A lo largo de los años he aprendido mucho de lo que he hecho correctamente, pero mucho más por mis errores corregidos. Quisiera compartir algo desde una posición de humildad de quien todavía sigue aprendiendo, pues ser madre dura toda la vida.

1) Cuídate

No puedes cuidar a tus familia si no te cuidas a ti mismo. El «cuidarse» tiene varios ámbitos y todos importantes. Para mí, personalmente, mi bienestar espiritual me impulsiona a ser mejor en las otras áreas. Es importante llenarte para tener suficiente para todos. Es importante cuidar tu salud para que puedas vivir con más calidad y más energía para todos los retos familiares. Eso, sin dejar de considerar, el ejemplo que dejas a tus hijos. También tu vida emocional y mental es importante. Es importante cuidar de cómo «alimentas» tu mente. La Biblia dice que la boca habla de lo que el corazón, está lleno. ¿De qué llenas tu corazón? ¿Qué cuidados tienes con lo que alimentas tu mente? ¿Cómo estás cuidando tu salud?

2) Cuida tu relación en pareja

Muchas mujeres al tener hijos, ponen inmediatamente a su marido en según lugar. Es cierto que hay momentos de crisis quen los que los niños necesitan nuestra total atención, a cualquier edad; sin embargo, ¡qué importante es ser padres juntos, llegar a un acuerdo en cuanto a normas familiares de respeto y consideración! Mi marido ha sido mi apoyo incondicional, incluso diciéndome la verdad cuando me he equivocado. Esto es amor, ayudarse mutuamente, pues no existen personas perfectas. Este es un trabajo en equipo y sois, juntos, padres. Aparta tiempo para charlar, hablar y estar solos. Haz planes sin los hijos cuando sea posible. Tomad decisiones juntos.

3) Sé ejemplo

«Haz lo que te digo, pero no hagas lo que hago» no funciona con nuestros hijos. Nuestro ejemplo, aún sin palabras habla mucho más alto que nuestros sermones llenos de buenos conceptos. Debemos actuar como queremos que nuestros hijos actúen. Si le decimos que no mientan, pero lo hacemos de vez en cuando, ellos aprenderán que está bien mentir en algunas situaciones. Esto es cierto en todas las áreas. Mira cómo te comportas, pues hay dos ojitos aprendiendo de cada acción tuya, sea buena o mala.

4) Sé transparente

La comunicación es muy importante en la familia y ser transparente, o sea, ser real con mis aciertos y errores me han ayudado a recibir el respeto de mis hijos. Hoy puedo decir que saben que no soy perfecta pero que les quiero y trabajo para el bienestar de ellos. Muchos nos escondemos detrás de una fachada y no nos damos cuenta que ellos pueden vernos como somos claramente. Nos engañamos a nosotros mismos. Ser yo misma me ha ayudado a tener una comunicación fluída con mis hijos cuando eran adolescentes, cuando pasaban por la fase de «que nadie les entiende». Creo que vieron que podían confiar pues no les iba a juzgar, pues no me veía perfecta.

5) Sé humilde

Quizás este tema va en conjunto con el anterior. Yo nunca pensé dos veces en pedir perdón cuando me he equivocado. No digo que haya sido fácil llegar a la conclusión de estar equivocada, muchas veces he necesitado a mi marido para verlo. Sin embargo, una vez llegada a tal conclusión, les llamaba a un lugar privado y les pedía perdón. Esto también ha ayudado mucho a que el rencor no estuviera presente en nuestra relación. Estos sentimientos negativos son barreras en las relaciones de padres e hijos.

6) Sé autoridad

«Tus hijos no necesitan a una amiga, necesitan a una madre». Este refrán tiene cierta verdad. No quiere decir que la relación no pueda ser amistosa con momentos de complicidad, pero los hijos necesitan parámetros. Mientras van creciendo las libertades van aumentando pero no les estamos beneficiando en nada cuando les dejamos dar riendas sueltas a comportamientos inaceptables. Tienen que saber quien «manda» y quien tiene la última palabra. Al contrario de lo que muchos pueden pensar, esto les da seguridad. Saben que en la vida hay límites y que hay que respetarlos en todos los ámbitos. Es importante que aprendan a tener respeto a las autoridades, para cuando sean adultos y profesionales. Así es el mundo y nuestro hogar es el taller en el cual forjamos su carácter.

7) Sé buena oyente

Para las mamás más parlanchinas como yo, eso puede ser un gran problema. Es importante que aprendamos a escuchar, en especial cuando ellos quieren hablar. Dependiendo del carácter del niño, sea más exclusivo en lo que quiere compartir. Así que, en estos momentos de oro en los que quieren hablar, deja todo lo que estés haciendo y escucha. Es importante no dar opiniones precipitadas sino solo escuchar. Quizás tu opinión puede esperar otro momento más oportuno. No desperdicies estos momentos en los que tu hijo quiere hablar y entra poco a poco en su mundo escuchando y aprendiendo todo lo que pasa en su mente.

8) Refrena tu lengua

Eso va en conjunto con el anterior. Las mamás tenemos muchas opiniones sobre todo. Muchas veces juzgamos todo a luz de nuestra propia experiencia. Cuando hay algo que nos parece que no está bien, sería bueno contar hasta 10. A mi, personalmente, me sirve mucho escuchar, hablar con mi marido sobre el asunto y sobre todo, hablar con Dios. Hay muchas veces que no sé lo que decir o hacer. Aplico muy seriamente lo que dice la Biblia: «Si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría, pídala a Dios, el cual da a todos abundantemente y sin reproche, y le será dada.» Santiago 1:5. Dios nos puede ayudar en este difícil trabajo de orientar a nuestros hijos.

9) Acuérdate que fuiste joven

Nuestros hijos van creciendo pero carecen de experiencia de vida. A mi me ayuda a pensar en ello, recordando cuando yo era joven para tratar de no cometer los mismos errores de mis padres. Por más buenos que hayn sido nuestros padres, seguramente no han sido perfectos. Es importante pensar en nuestra experiencia de vida, recordarnos cómo nos sentíamos y cómo se portaron nuestros padres, como buenos o malos ejemplos. Siempre tuve mucha gratitud por mis padres, y aunque he cometido mis propios errores, he tratado de no reproducir los suyos.

10) Ama sin condiciones

En la Biblia, el sabio Rey Salomón dice que para todo hay un momento oportuno. En ocasiones, todo lo que nuestros hijos necesitan es ser amados. Habrá momentos cuando se hayan equivocado, o hecho malas elecciones, o tomado rumbos destructores. No necesitan ser juzgados pues el mundo ya lo hace y a veces tienen que vivir con las consecuencias de sus equivocaciones. De nosotros, necesitan el amor incondicional, el amor que ignora el error. No estaremos apoyando o amando sus errores, pero amándolos. Así hace Dios con nosotros. Os invito a leer 1 Corintios 13.

Espero que estas sugerencias desde mi propia experiencia os pueda inspirar a hacer algunos cambios positivos y que os puedan ayudar a ser las madres que deseáis ser.

No te olvides que tu hijo es un regalo que Dios te ha encargado:

Son los hijos herencia que da el Señor,
son los descendientes una recompensa.
Como flechas en la mano del guerrero,
son los hijos que en la juventud se tienen.
¡Feliz quien llena con ellas su aljaba!
No será humillado si se enfrenta
al adversario en la puerta de la ciudad.

Salmo 127:3-5

Mara

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Bizcocho de Zanahorias

Esta receta es ideal para que los niños merienden después del cole. Lo preparaba antes de recoger a los niños y cuando entraban en casa y sentían el olor a chocolate caliente corrían a la cocina gritando – ¡Bien! ¡Bizcocho de zanahoria con chocolate! 

Bolo de Cenoura com Cobertura de Brigadeiro - Uma Delícia de Receita

Ingredientes:

3 zanahorias medianas

3 huevos

½ taza de aceite de oliva

1 ½ taza de azúcar 

1 ½ taza de harina de trigo

1 cuchara sopera de levadura Royal

Cobertura:

½ taza de azúcar

3 cucharas de leche

2 cucharas de chocolate en polvo (Colacao)

Fideos de chocolate (opcional)


Preparación: Precalentar el horno.  Lavar y pelar a las zanahorias, cortándolas en rodajas. En el vaso de la licuadora poner los huevos, añadir el aceite, la zanahoria y el azúcar en este orden. Batir hasta licuar los ingredientes. En un bol, tamizar la harina y la levadura, verter la mezcla de zanahorias sobre la harina con levadura y mezclar bien. Untar un molde con mantequilla y espolvorearlo con harina, sacudiendo para que caiga la harina sobrante. Verter la masa en el molde y llevar a hornear a 180cº durante 30 a 35 minutos.  Al pinchar con un palillo debe de salir limpio. Dejar enfriar por 10 minutos y desmoldarlo sobre un plato.
Llevar al fuego una olla con los ingredientes de la cobertura, dejar que hierva para espesar. Verterla caliente  sobre el bizcocho, y decorar con los fideos. ¡Qué aproveche!

Bolo de cenoura com cobertura de chocolate e granulado! ️ - Picture of Casa  de Bolos - Campo Belo, Sao Paulo - Tripadvisor

Esta receta me recuerda mucho a la crianza de mis hijos. Cada día preparábamos el  desayuno mi marido y yo mientras los niños se preparaban  para  ir al cole o al  Instituto y cuando terminaban se incorporaban a nosotros  en los preparativos. Desayunábamos todos juntos y agradecíamos la noche de descanso y pedíamos por los exámenes  y por algún amigo o profesor que pasaba por dificultades. Les abrazábamos  y les decíamos a cada uno de ellos  «¡Te amo, hijo mío!   Nunca te olvides, ¡Eres muy importante para mí!». Buscábamos a cada día infundir  en nuestros hijos confianza y certeza de que eran obras primas de un Dios vivo.  Estos hábitos demandaban de nosotros  disciplina y esfuerzo, pero sabemos que esta actitud  ha marcado positivamente nuestra vida y la vida de nuestros hijos, que crecieron con un auto estima y un auto concepto muy equilibrado.


“Instruye  al niño en el camino correcto y aun en su vejez no lo abandonará”

Proverbios 22:6

Rosa

Cosas de Casa, Familia

Nuestro hogar, nuestro refugio

En estos días de cuarentena, el ambiente en nuestro hogar puede haber cambiado. Lo que normalmente es un refugio, puede pasar a ser una prisión. Lo que podemos hacer es utilizar este tiempo para transformar el ambiente y prepararlo para cuando la vida vuelva a su normalidad y vuelva a ser el refugio del mundo de afuera.

Es importante hacer que nuestra casa, nuestro hogar, pueda reflejar paz y amor.  Esto se plasma en los pequeños detalles como limpieza, decoración, orden, etc.   Hay un sinfín de recursos para la mujer ocupada de nuestros días y podemos utilizarlos para nuestro beneficio.

¿Qué sentimientos queremos reflejar en nuestro hogar?  Hoy no doy muchas respuestas, sino os invito a pensar detenidamente en estos temas:

1. Amor: ¿nuestra familia ama de sentimiento y acción? ¿que puedo hacer para que mis hijos y marido se sientan amados?


2. Paz: ¿tenemos paz en nuestras relaciones de familia? ¿les gusta a mis hijos estar en casa o prefieren siempre ir a la casa de sus amigos? ¿Por qué?


3. Tranquilidad: ¿se respira tranquilidad? ¿la decoración y el orden invitan a actividades contemplativas o de relajación?

4. Seguridad: ¿nos sentimos seguros de poder hablar de nuestros sentimientos? ¿sabemos que podemos contar los unos con los otros?


5. Confort: ¿nuestro hogar provee el lugar adecuado para que todos estén relajados? ¿es un hogar que invita a estar? ¿pongo valor en el lujo o en estar a gusto y relajados?


6. Cuidado: ¿cuidamos nuestra casa de manera adecuada? ¿todos participan en el cuidado para que no solo una persona se agote al hacerlo?

Son cosas básicas, podemos pensar, pero analicemos nuestro hogar a la  luz a estas cualidades y podremos ver que en diferentes momentos, alguno de estos valores puede estar minado por la vida rápida y ocupada que llevamos.  

No quiero para nada decir con eso que lo tengo todo controlado. Esas preguntas me las hago también.

Te invito a pensar, sacar un papel y lápiz y hacer una evaluación, incluso preguntando al resto de la familia. Con la información en la manos, puedes poner algunos objetivos. Aprovecha de esta cuarentena para transformar tu hogar.

Y todo lo que hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor y no para los hombres; sabiendo que del Señor recibiréis la recompensa de la herencia, porque a Cristo el Señor servís. 

Colosenses 3:23-24

Mara

Crecimiento Espiritual, Crecimiento Personal, Familia, Organización, Salud y Belleza, Uncategorized

7 maneras de vivir con intencionalidad

¿Sabías que en el siglo XXI estamos padeciendo de un problema general? Se llama falta de atención. Y no me refiero a la enfermedad desde el punto de vista clínico. No, me refiero al fenómeno que cada vez se expande más por la sociedad aplastada por el peso de la tecnología.

Varios estudios han demostrado cuánto ha disminuido la productividad de las personas porque sus cerebros están cambiando constantemente de actividad: correo electrónicos,  alerta de mensajería instantánea, mensajes de texto, varias ventanas abiertas en el navegador de internet y un ratón que hace clic aquí y clic allá, actualizaciones en Facebook, llamadas telefónicas… solo de pensarlo me agota pero sé que así vivo yo también.

El resultado de todo esto es primero, como dije, poca productividad. El famoso mito de la multitarea quita más de lo que da.  Muchas tareas comenzadas, pocas terminadas. Agotamiento físico y mental.

Y últimamente Dios ha estado llamando mi atención al respecto. Aparentemente estamos en muchas cosas y lugares a la vez, pero nuestra mente no está en ninguno. No de manera completa.

Esa no es la vida abundante que Dios quiere para ti y para mí. Una vida de torbellino, agotada, con la mente corriendo de aquí para allá, ese no es el plan de Dios. El plan de Dios es una vida con prioridades, una vida con paz en medio del caos, una vida en la que aprovechemos el tiempo. Pero aprovechar el tiempo no es hacer varias cosas a la vez durante el mismo período de tiempo sino vivir a plenitud cada período de tiempo…porque nuestros días son muy cortos en esta Tierra. El plan de Dios es que vivamos con intención. 

intención.(Del lat. intentĭo, -ōnis).f. Determinación de la voluntad en orden a un fin.

¿Qué vamos a determinar? Bueno, empecemos por hacer lo que leí una vez (lamento no recordar el libro): donde estemos, estemos allí 100%.  Y no me refiero solamente a un lugar físico, me refiero a la tarea que estemos haciendo, a la conversación que entablemos, etc.

Así que hoy te propongo otra lista de “7”, para vivir con intención la semana y ver qué tal nos va.

  1. Aparta al menos 30 minutos para darle tu atención completa a Dios. {Si esta meta es muy alta para empezar, dedica menos tiempo, pero con toda intención.} Ese será sin duda el momento más importante de tu día.
  2. Cuando tu esposo llegue a casa en la tarde, o los niños regresen de la escuela, conversa con ellos mirándoles a los ojos, escuchando de veras. No trates de combinar ese momento con otro para ganar tiempo. Estas son las personas más importantes en tu vida. Lo demás puede esperar.
  3. Besa y abraza. En la vorágine del siglo XXI hasta esto se ha vuelto escaso. Dicen los que saben que los matrimonios que se besan y abrazan todos los días, son más felices. Y los niños que reciben besos y abrazos de sus padres se sienten más seguros y queridos.
  4. Usa un reloj o temporizador. Dividir las tareas por tiempo ayuda a concentrarnos mejor. Veinticinco minutos es un buen número. Y al terminar los 25, toma agua, camina un poco, haz algo que implique cambio de actividad. Y vuelve a empezar con otros 25 minutos.
  5. Alimenta tu alma. Cambia un poco de televisión por un buen libro. Y si no eres de las que gusta mucho de la lectura {gracias de paso por dedicar unos minutos a esta}, entonces “escucha” un libro. Esta era de tecnología nos da esa ventaja. Leer, o escuchar, un buen libro nos desafía a pensar, y así ejercitamos el cerebro, que a fin de cuentas también es un músculo.
  6. Cuida de tu cuerpo. El templo del Espíritu. Sé que nos cuesta…a mí me cuesta. Pero somos responsables de él. ¿Media hora de ejercicios cada día es mucho? Comienza por menos, quizá tres veces por semana. El asunto es ser intencionales con los ejercicios, con lo que comemos.
  7. Cena en familia. Este es otro de los hábitos casi extintos de nuestra era post-moderna. Pero, ¿sabías que las familias que cenan juntas son más saludables emocionalmente? ¿Y que los hijos que cenan con sus padres son más abiertos y menos propensos a conductas dañinas? Los horarios a veces chocan, el tráfico nos demora, etc. Pero no es imposible. Si no todos los días, busca que sea la mayoría.

Podríamos añadir otras cosas, pero voy a empezar por estas siete. Sí, para mí misma. Tal vez tú las quieras hacer tuyas.

Quiero vivir con intención mis días y así traer al corazón sabiduría.

¡Esa es la vida que Dios diseñó!

Wendy

Cosas de Casa, Familia, Recetas

Pastel mousse de chocolate en familia

La cocina provee un espacio ideal para convivir en familia.  Cocinando, los niños aprenden, experimentan, y crean memorias que quedarán con ellos por toda la vida.  

Me gustan mucho los programas de Canal Cocina:  Cocina de Familia  – y lo recomiendo.

Cuando cocinas ¿consideras las preferencias de tus hijos?

Cuando cocinas ¿tratas de proveer un menu equilibrado?

Cuando cocinas ¿incluyes a tus hijos en las preparaciones?

Estas son algunas preguntas para reflexionar y quizás cambiar algunas costumbres para mejorar las relaciones familiares.  Crea memorias inolvidables en familia … en especial preparando este pastel de Debora.  Aprovecha para hablar de cosas importantes como valores y principios para la vida.  La Biblia dice:

Grábate en el corazón estas palabras que hoy te mando. Incúlcaselas continuamente a tus hijos. Háblales de ellas cuando estés en tu casa y cuando vayas por el camino, cuando te acuestes y cuando te levantes.

Deuteronomio 6:6-7

Base:

500 grs de harina 

250 grs de mantequilla sin sal 

150 gramos de azúcar 

2 yemas de huevo 

50 gramos de harina de almendras 

Mezclar bien hasta que quede suave, reposar durante 30 minutos a temperatura ambiente Estirar la masa con 0,5 cm y acomodar la masa en una forma con fondo desmontable (25 cm de diámetro) Hornear hasta que esté ligeramente dorada.

Relleno: Caramelo de Sal 

180 gramos de azúcar 

90 g de mantequilla 

5 gramos de sal 

150 gramos de nata líquida 

Lleve el azúcar a caramelizar, agregar la crema agria, mantequilla y sal. Volver al fuego para formar una crema. 

Mousse trufado:

360 grs de chocolate semidulce 

350 gramos de nata líquida

200 g de crema ligeramente batida

Derretir el chocolate, añadir la nata y añadir la crema batida 

Montaje: 

En la base asada, distribuir 100 gramos de frutos secos (nueces, almendras a su gusto), por encima añadir el caramelo de sal y sobre ello la mousse trufado.  Llevar a la nevera hasta cuajar. 

Espolvorear con cacao y decorar al gusto.

Debora

Celebración, Familia

Impresionar vs emocionar

En los Estados Unidos el 14 de febrero, día de San Valentín, ha ido evolucionando a través de los años en la cultura popular, en los medios de comunicación y en las redes sociales que tanto nos rodean.

En muchos países es común obsequiar regalos a personas cercanas como a la maestra, a los amigos, los padres a los hijos y viceversa, de forma que se ha ido convirtiendo más en el día del Amor y la Amistad.

Cuando nuestros hijos nos preguntan cuál será el mejor regalo para uno u otro en cumpleaños, navidades o en fechas como esta, nos encontramos con una oportunidad perfecta para una enseñanza más practica y profunda de la vida, cuidar las relaciones saludables con los demás.

Las celebraciones se han convertido en algo tan materialista, que será importante ser intencional si queremos que nuestras familias elijan un camino distinto al de la corriente actual que se vive en las redes sociales y en sus atractivos anuncios y slogans publicitarios.

14 de feb

Cuando obsequiamos algo en una fecha especial, es prudente hacernos la siguiente pregunta,¿estoy intentando impresionar a la otra persona?  o ¿me emociono de ganas por hacerla feliz y sacarle una sonrisa de oreja a oreja, sin realmente esperar nada a cambio?

  • PALABRAS SABIAS Estas sabias palabras de Jesús, “donde esté tu tesoro, allí estará tu corazón”, nos recuerdan que la intención del corazón  de la persona nace de un lugar más sincero, y eso muchas veces será más que evidente a la hora de obsequiar algo.
  • MIRA EL CORAZÓN Si en tu corazón, realmente atesoras a la persona y sinceramente piensas en ella con empatía y cariño, y eres capaz incluso de perdonarla por sus pasados y futuros errores y defectos, ENTONCES pensar en ella será mucho más fácil para ti.
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  • ¡PERO CUIDADO! Si desde un principio nuestros hijos se identifican más con las siguientes afirmaciones, es muy probable que se encuentren frustrados a la hora de dar y recibir los regalos de los demás en el futuro.

PIENSAS MÁS EN TIsi te preocupas más por el valor del regalo que lo que le pueda gustar o servir a la persona.PIENSAS MÁS EN TIsi no puedes evitar presumirle a todo el mundo lo que le regalaste a alguien.PIENSAS MÁS EN TIsi no dejas de comparar tu regalo con lo que esa misma persona te ha regalado a ti.PIENSAS MÁS EN TIsi no te has planteado siquiera si a la persona le gustaría recibir algo totalmente diferente a lo que a ti te gusta, como una poesía, una invitación a hacer algo juntos, o entradas a ver un espectáculo, por ejemplo.

  • LEE UN POCO ACERCA DEL TEMA En el muy recomendable libro “Los cinco lenguajes del amor de los niños” de Gary Champan aprendí que NO TODOS hablamos el mismo idioma en cuanto a como comunicamos nuestro aprecio y amor por las personas.
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Chapman nos muestra que si personalmente te emocionan mucho los regalos que recibes, es muy probable que tu lenguaje de amor incluya, “dar y recibir regalos”, ¡y eso es maravilloso que lo sepas!Las personas que te aman deben saber que para ti, un regalo es una muestra de cariño importantísima que te demuestra que a la persona le importó mucho dedicar tiempo, dinero y esfuerzo para preparar un regalo para ti.

  •  ¡PERO CUIDADO! EXPLICALES que no todos sentimos ese mismo mensaje de amor y cariño al recibir ESE MISMO regalo que a ellos tanta ilusión les hace. 
  • REFLEXIONA CON ELLOS Algunos se sienten amados y emocionados por muestras de cariño muy distintas a las suyas. Incluso puede que sean más sencillas, como palabras sinceras escritas con cuidado en una carta o en una bonita postal. Pasar tiempo juntos, una invitación a cenar o incluso una donación en el nombre de la persona a alguna causa que le importe mucho, todo esto pueden ser ideal para esa persona especial!
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  • ENSÉÑALES LO QUE HAS APRENDIDO EN TUS EXPERIENCIAS Una cosa es cierta, nuestros hijos deben saber que le agraden o no los regalo a los demás, lo importante es conocer a la persona y ser sincera con nuestra muestra de afecto hacia ella. Deben también aprender de nosotros, sus padres y familiares, las lecciones más importantes de la vida:

Nuestras vidas no se enriquecen por el valor de las cosas materiales que circulan a nuestro alrededor, sino por el valor que nos aporta la relación valiosa que tenemos con las personas que nos rodean!¡El mejor TIP para hoy! No olvides modelar para tu familia dar regalos fuera de esas fecha señaladas. ¡Esa es la mejor y más sincera sorpresa que puedan darle a alguien que aman y realmente aprecian!Un acto de amor siempre nace de un corazón lleno de gratitud, así que enséñales a ser un buen amigo y contar a sus amigos cuando cuentan sus bendiciones.

Feliz día del amor y la amistad a todos!

Angela

Familia

El complejo de Cenicienta

El otro día, estuvimos con un grupo de adolescentes en casa, ¡una  tarde de princesas!

Hicimos juntas dos  tartas, las rellenamos con dulce de leche, fresas, Nocilla y las  decoramos con rosas de Buttercream color rosa.  Después de degustar las tartas entre risas  y comentarios de  «¡Hmmm que delicia!», nos sentamos para ver la peli   “La Cenicienta” entre susurros y suspiros!!!

Elegimos La Cenicienta  porque les encanta a las chicas y no es necesario en ningún momento decir -¡Poner Atención!  Este tipo de peli entra  directamente en el mundo emocional del subconsciente. Las leyendas siempre tienen  enseñanzas escondidas  del inconsciente colectivo.

La fotografía bien cuidada, las canciones, los  vestidos  maravillosos, el Príncipe Azul, el castillo, la naturaleza, todo  nos adentra en un  mundo mágico que llevamos dentro, dónde todos los problemas se resuelven de modo mágico, ayudada por una  hada madrina que aparece del modo que una menos espera.  ¡Al final ella sale victoriosa!  ¡Es rescatada por  el Príncipe Azul!    Sólo mirar el cartel de la chica con vestido azul y  el pelo suelto bailando con el viento, ya hace suspirar a nuestras bellas durmientes que llevamos dentro!   La Cenicienta (Hermanos Grimm, Alemania 1812) se llamaba Ela, pero se deja llamar Cenicienta por sus hermanastras y madrastra (nunca se quejó del malvado apodo resultado de la envidia de su hermanastras). Pone a relieve  dos mitos universales: El amor a primera vista y el mito del Príncipe Azul.  

Cenicienta, en relación con los  demás era una chica muy educada pero muy pasiva, todo lo que es mucho es demasiado, debemos buscar el equilibrio es más sano. Ella  aceptaba todo sin quejarse, sin defenderse, incluso de los maltratos.  

En relación consigo misma Cenicienta era agresiva, pues no sabía amarse a si misma buscando hacer respetar sus derechos, no tuvo ayuda para que aprendiera a reconocer su propios sentimientos como: pérdida y dolor (pérdida de la madre y del  padre, de su posición de hija), tristeza (por el sufrimiento que pasaba y  maltrato de su supuesta familia), rabia (por la forma como la trataban), ira contenida (el maltrato duró años), decepción (por no dejarla ir al baile), auto valor (se sentía desdichada), culpada porque muchas veces asumía la culpa que no era suya (se culpaba de que la trataran mal).

Era muy muy joven y todavía no había aprendido a distinguir sus emociones y las críticas destructivas y las manipulaciones emocionales que la madrastra y sus hermanastras le infligían. Tampoco tenía fe en Dios, puesto que la fe en Dios nos sustenta y nos ayuda a sobrellevar las situaciones más difíciles de la vida.

Con la ayuda de otros, Cenicienta podría haber aprendido a ser asertiva, a valerse por sí misma, a hacer frente a la madrastra, a no ser sumisa a sus hermanastras, al final la casa era suya y no tenía razón de servir como criada, tenía el derecho de ser tratada como una igual por su familia. Cenicienta podría aprender a ser libre y a no tener que esperar un Príncipe azul para liberarla. Ella poseía capacidades y habilidades, era responsable, pero no se daba cuenta de su valor. Era alegre, sabía auto motivarse cantando, hablando mentalmente, buscando animarse recordando a su madre (ser generoso y tener valor). Se encontraba muy sola, no tenía amigos (a no ser los animales, que tampoco la podía aconsejar y enseñar). Esto es un problema actual, nuestros adolescentes muchas veces no tienen buenos amigos y nosotros padres tenemos que ayudarles a traer amigos a casa para que disfruten y compartan sus vidas.

Unas de las frases de película que me gustó: “Si hacen lo que hacen, no es razón para hacerlo”. Es bueno poder recurrir a una frase así porque los adolescentes siempre nos dicen:- Si todos mis amigos van a esta fiesta, ¿por qué yo no?  Todos mis amigos la usan, ¿por qué yo no?

Ahora que ya contáis con esta sugerencia de guión, llamen a los amigos de vuestros hijos  a casa y  ¡hagan una sesión de cine en casa!!!!  ¡Va a ser muy divertido!!!

“Ama a tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma, con todas tus fuerzas y con toda tu mente; y ama a tu prójimo como a ti mismo” – Lucas 10.27

Rosa

Familia

El hábito que está inyectando vida a mi matrimonio

La vida pareciera ir mucho más rápido en estos tiempos que en siglos atrás. Las obligaciones se multiplican y las cosas que nos distraen de lo que realmente importa proliferan como esas florecitas pequeñas que parecen atractivas pero que en realidad son malas hierbas y nos cuesta mucho eliminarlas del jardín.

Hace algunas semanas mi esposo y yo decidimos que saldríamos a caminar todos los días. Como vivimos en lugar de clima muy caliente, hacerlo al anochecer nos resulta maravilloso, especialmente ahora que los días son más largos por el horario de verano. El motivo original de la decisión fue la salud. Tanto él como yo pasamos mucho rato sentados frente a la pantalla de una computadora y ya todos sabemos que eso no es nada bueno cuando del bienestar físico se trata.

Pero resulta que esas caminatas nos han traído mucho más que oxígeno a la sangre y la quema de calorías. Las caminatas de las tardes se han convertido en el tiempo en que podemos conversar, sin interrupciones. Hablamos de asuntos importantes y otros no tanto. Comentamos lo que hicimos durante el día. Aprovechamos para hacer planes, compartir sueños. Miramos el vecindario, disfrutamos ver el sol desaparecer, escuchar los sinsontes que son muy comunes donde vivimos. Las caminatas se han convertido en un momento para reconectarnos el uno con el otro después de muchas horas separados por el trabajo y los quehaceres del día.

Y la razón por la que te cuento todo esto es porque como dice el título, este hábito está inyectando vida a nuestra relación. Si no somos intencionales, el ajetreo, las responsabilidades y la rutina poco a poco van deteriorando un matrimonio. Esta relación, como el cuerpo físico, necesita su propio “oxígeno”. Necesita tiempo para mirar a los ojos del otro. Necesita caminar tomados de la mano. Un buen matrimonio se nutre cuando silencia al resto del mundo y se enfocan el uno en el otro.

Sí, hay días en que por una razón u otra se nos hace imposible dar la caminata, pero lo estamos convirtiendo en prioridad. Mi querida lectora, quizá una caminata no sea lo que quieres incorporar a tu horario, aunque es excelente para la salud; pero quiero invitarte a descubrir algo que pueda aportar ese oxígeno tan necesario a la relación. Conversa con tu esposo y decidan qué pueden hacer para dedicar un espacio del día a ustedes dos.

Al principio pudiera incluso hacerte sentir un poco egoísta por apartar este espacio de tiempo y quitarlo a la casa, los hijos o cualquier otra cosa; incluso puede que tengas que renunciar a ver un programa de televisión o algo parecido, pero vale la pena. Esta es una inversión que tiene dividendos seguros y buenos. Para que se convierta en hábito tienen que pasar más de 30 días, según dicen algunos expertos en el tema de formación de hábitos. Sin embargo, llegará un momento en que anhelarás esta parte de tu día. ¡A mí me está pasando! A veces me cuesta ponerme los tenis y salir a caminar, pero cuando pienso en el beneficio de disfrutar unos minutos con el amor de mi vida, ¡salgo adelante!

Hace poco le dije a alguien: “las cosas buenas de la vida siempre cuestan, especialmente las relaciones”. Y hoy te lo digo a ti. Un buen matrimonio no puede subsistir con los recuerdos del noviazgo o de los primero años… como mismo tú y yo no podemos vivir hoy con el oxígeno de ayer. Necesitamos respirar cada día aire nuevo y el matrimonio necesita que se le inyecte vida cada día también. Esto nadie lo puede hacer por nosotros, es nuestra responsabilidad.

Como te dije al principio, la vida pasa rápido, muy rápido. Entender eso debe hacernos  dar prioridad a lo verdaderamente importante: “Enséñanos a entender la brevedad de la vida, para que crezcamos en sabiduría” (Salmos 90:12).

¡Bendiciones!

Wendy

(Publicado originalmente en wendybello.com)

Cosas de Casa, Crecimiento Personal, Familia, Organización

La paz y la tranquilidad en el hogar

Estos dos temas van juntos, como causa y efecto.  Si hay tranquilidad, hay paz; si hay paz, hay tranquilidad.  Los abordaremos juntos. 

La paz en el hogar viene, en primer lugar, como resultado de las buenas relaciones.  Podríamos escribir varios libros sobre este tema.  Obviamente no podremos cubrir todas las causas para las relaciones difíciles.  Aquí dejaremos algunas que a nuestro parecer son muy comunes:

1) El orgullo 

2) La falta de flexibilidad

3) La falta de empatía

Creo que todo tiene solución si uno se dispone.  No nos engañemos, cuesta mucho, así que sugerimos hacer pequeños cambios hacia la dirección correcta.  Son actitudes relativamente fáciles que en muchas ocasiones no somos capaces de tenerlas por las emociones.  

Hoy dejamos 3 pasos-bebe, pequeños pero eficaces.

PASSOS PRÁCTICOS:

1) La próxima vez que te equivoques, no tardes en pedir perdón.

2) La próxima vez que un plan no salga a tu manera, toma la actitud de evaluar y no reaccionar. Quizás hay otros caminos mejores que el tuyo.  

3) La próxima vez que discutas con tu pareja o hijos, deja de hablar, oye y trata de ponerte en su lugar antes de dar tu opinión.  En vez de opinar en todo, haz preguntas y escucha.  Si uno tiene la oportunidad de explicar su punto de vista se calma y puede recapacitar.

Estos tres pasos están reflejados en lo que nos enseña la Biblia:

Filipenses 2:3:

No hagáis nada por egoísmo o vanagloria; al contrario, sed humildes y considerad que los demás son mejores que vosotros.

La paz y tranquilidad también pueden fluir del ambiente de la casa, la limpieza y el orden.  Son pequeños detalles que hacen del ambiente acogedor y llenos de paz.  La organización de los horarios, de las finanzas, de las vacaciones – todo en su debido lugar y tiempo promueve la paz.  

Os dejamos una página de la internet que puede ayudaros en la tarea de organizaros y promover el bienestar en vuestras casas.  

Fly Lady en Español

Y para terminar una foto de Vania que nos relaja solo de mirar …

¿Verdad que esta mesa puesta para un té relaja?  Pues es un ejemplo que podemos seguir, aún que no instamos a la perfección del hogar, hay momentos en que los detalles pueden hacen maravillas.  Probad a preparar un desayuno especial o un té inglés para charlar sobre los problemas.  Seguramente podréis tener más buenos resultados en vuestras relaciones familiares. 

Mara y Vania

Crecimiento Espiritual, Crecimiento Personal, Familia, Feliz Año Nuevo, Salud y Belleza

Disciplinas para este nuevo año

Me estreno escribiendo en este blog, así que estoy un poco nerviosa. Pensando en qué compartir con vosotras, y pensando en que estamos en los primeros días del año, es inevitable pensar en nuevos propósitos, nuevos retos, nuevas ilusiones y nuevos hábitos. Y podría hablaros de muchos propósitos que tengo… pero lo cierto es que a veces es mejor proponerse sólo uno, dos o tres como mucho, porque bien sabemos que siempre estamos motivados al principio del año para conseguir los retos, pero lo cierto es que cuando volvemos a la rutina y conforme pasan los días, vamos dejando de seguirlos, nos desinflamos y perderemos el objetivo. Y es que algo muy importante para conseguirlos es la DISCIPLINA. Y os cuento 3 de las Disciplinas que he empezado a poner en práctica en mi vida y que quiero seguir trabajando en este nuevo año.

1. DISCIPLINA POSITIVA

Ha sido mi gran descubrimiento en el año 2017. Soy mamá de dos niños preciosos, Samuel y Oliver, y su educación es un constante reto para mi. Desde el año pasado mi hijo mayor asiste a una escuela Montessori, una educación alternativa a la educación reglada en España, basada en el método que creó María Montessori; y estoy encantada, ya que la base de esta educación es seguir el ritmo de aprendizaje de cada niño, respetar sus intereses y que aprendan disfrutando, fomentando la autonomía y la cooperación. Una de las mejores frases de Maria Montessori es: «Ayúdame a hacerlo por mi mismo». Creo que en estos primeros años, esto es fundamental. Desde que mis hijos asisten a esta escuela, me planteo como educarlos de una forma respetuosa hacia ellos, hacia mi misma y hacia las circunstancias, educarlos en un ambiente de tranquilidad y diálogo, sin gritos y peleas. Y esto es TODO un reto, pues a menudo la paciencia se pierde, y el cansancio y las prisas no ayudan. Hice un curso en esta escuela sobre DISCIPLINA POSITIVA y me pareció muy interesante empezar a hablar más en positivo a mis hijos, diciéndoles más lo que Sí deben hacer que lo que NO, (es increíble la de veces que las madres decimos la palabra NO) hay muchos que son prescindibles, os aseguro que es cuestión de pensarlo y cambiar el chip. Enfocarnos en soluciones, ver los errores como oportunidades de aprendizaje, ser modelo para ellos, y entender como actúa el cerebro de un niño…son de las cosas más importantes que he aprendido y que intentó poner en práctica cada día.  Intentó preguntar más, dejarles pensar y escucharles, no dar tantas órdenes. Que ellos razonen y entiendan porqué hacemos las cosas. No es fácil, pero lo intentaré y trabajaré en este año.

2. DISCIPLINA EN EL DEPORTE Y LA VIDA SALUDABLE

Otro de mis retos conseguidos en 2017. El deporte y alimentarme bien ya son hábitos de mi vida, pero que necesitan también mucha disciplina. Después de mi doble maternidad engordé bastantes kilos y llevaba mucho tiempo que no había manera de bajarlos. Entré en un bucle de comer mal, de no reservar tiempo para cuidarme y pensar sólo en los demás. Y me di cuenta que no podía seguir así…decidí apuntarme al gimnasio, busqué una entrenadora personal, porque necesitaba mucha motivación y alguien que llevara un control. Ella ha sido muy importante en este proceso, me ha enseñado a alimentarse bien y sacar partido del ejercicio. Y he bajado 14 kilos hasta el momento, y me siento súper bien. Ha sido un súper reto, que continúa en este 2018.

3. DISCIPLINA EN LA ORACIÓN

Y ésta es la más importante, pero la que reconozco que es más difícil de llevar a acabo. ¿Porqué? Porque DIOS es el creador de todo, es mi Creador, relacionarme con Él es tan importante como respirar, y la forma de comunicarme con Él es por medio de la ORACIÓN. Y esto también requiere de mucha Disciplina, pues tenemos que hacer tantas cosas, los días son cortos, tenemos tantas distracciones con lo que tenemos, nos rodea y vemos, que a menudo nos falta tiempo para lo que no vemos, y para lo importante. Sin duda, mi gran propósito este año es pasar más tiempos a solas con mi Dios, Él que más me ama y comprende, El que más oportunidades me da, El que más me enseña y más me inspira, conocer a Dios es lo que da sentido a mi Vida y me hace ser quien soy. Gracias Dios por estar siempre cerca de mí y buscarme para tener una relación personal conmigo. No merezco tanto Amor, pero por medio de Jesús y Su Gracia me lo da, y lo siento en cada detalle y momento de mi vida.
Os animo a proponernos nuevas Disciplinas por las que merezca la pena vivir con propósito este 2018.

FELIZ AÑO NUEVO A TODAS LAS LECTORAS DEL BLOG.

Ana Resa