
¿Cuántas de vosotras os habéis despertado una mañana con el descubrimiento que tenéis montañas de ropa sucia y ya no lo podéis ignorar? Lo que sigue son horas de llenar a tope la lavadora, encontrar maneras creativas para colgar la ropa (ya que te faltan pinzas y espacio en el tendedero) y pasarte la noche entera con Netflix y una montaña fresca de ropa que ahora necesita ser doblada y guardada. La verdad es que cuando hablamos de las tareas de casa, hay poco que resulta más estresante para mí que las coladas de ropa. Por eso he decidido dedicar mi primer blog con Dulce Fragancia para hablar un poco sobre cómo simplificar esta tarea para poder ahorrar un poco de tiempo y energía.
Lo más importante que puedes hacer para simplificar tu responsabilidad con la colada es lavar la ropa sucia con más frecuencia. No esperes a llenar la lavadora a tope para empezar una carga de ropa. Además, he aprendido que al no tener tanta ropa en la lavadora, la ropa sale más limpia y fresca que cuando la lleno por completo. No todas vosotras tenéis la responsabilidad de lavar la ropa para cuatro personas, y tal vez con poner una carga en la lavadora cada dos o tres días, os vale. Pero si estás estresada con este tema, sugiero que incrementes la frecuencia con la que lavas la ropa.

¿Queréis saber otro secreto? Meto la ropa, las toallas, o las sábanas a lavar cada día y ni siquiera separo la ropa de color de la ropa blanca. No sé si habéis visto en los supermercados, pero la mayoría de ellos venden toallitas que capturan los colores que suelta la ropa al lavarla. En cada carga de ropa que meto a la lavadora uso una toallita de Iberia Protect para que mi ropa blanca se queda blanca y la de color mantenga el color. Notarás que cuando saques la toallita, además de estar teñida con el color que soltó la ropa, también habrá atrapado trocitos de suciedad que llevaba la ropa.
Con lavar menos ropa más frecuente, resulta más fácil adaptarlo a tus rutinas. Solo tarda un par de minutos meter la ropa en la lavadora y empezar el ciclo. Y si estás lavando más a menudo, no debería de tardar más de diez minutos en colgar la ropa y guardarla será aún más fácil. El truco es incorporarlo a tus rutinas diarias para que lo hagas automáticamente- sin pensarlo o decidirlo. Si consigues hacer eso, nunca más te encontrarás con esa montaña ineludible de ropa sucia.
Carina