
Algunas ideas sencillas para un desayuno en el día de San Valentín.

Podemos empezar el día con un desayuno muy especial y no hace falta trabajar mucho, ni gastar dinero extra.
Estas son unas pequeñas sugerencias que les encantará a los tuyos.

Prepararemos las tostadas de todos los días, pero marcamos la forma de corazón con un cortador de galletas, y lo rellenamos de mermelada de fresa.
Lo mismo puedes hacer con los hot cakes, tortitas, o crepes en forma de corazón. A las fresas las cubrimos con chocolate (solo la mitad) para decorar. Para acompañar cualquier bebida de color rojo o rosa; por ejemplo, un batido de fresa, moras o zumo de frutos del bosque.



Y muy importante: decorar la mesa con un mantel o servilletas en color rojo, con algún florero, o rosas rojas, un globo rojo, o cualquier detalle que se te ocurra en estos colores.

Y todo lo que hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor y no para los hombres, sabiendo que del Señor recibiréis la recompensa de la herencia, porque a Cristo el Señor servís.
Colosenses 3:23.