Crecimiento Personal, Familia

El amor en nuestro hogar: TIEMPO

Con el fin de inspirarme para poder escribir esta publicación me he relajado con los ojos cerrados. He estado pensando en las diferentes veces en que me he sentido amada en casa de mis padres o ya en mi casa con mi familia.

Cuanto más pensaba, más se me hacía evidente que sentirse amada no tiene nada que ver con lo material.

Me he sentido amada cuando:

1. Mi mamá peinaba mi pelo largo y me ponía sentada al sol para secarlo. 

2. Me sentía amada cuando mi padre me forzaba a que me sentara en su regazo aún cuando ya casi no podía caber.  

3. Me sentía amada cuando mis abuelos se sentaban a la puerta de casa para verme jugar con mis amigos.  

4. Me siento amada cuando mis hijas (que viven fuera) quieren llamarme a distancia solamente para charlar de cosas cotidianas. 

5. Me siento amada cuando mi hijo entra por la puerta y me da un abrazo gratuito. 

6. Me siento amada cuando mi marido se sienta a mi lado para ver una de mis pelis, solo para estar conmigo. 

Si lo analizamos, vemos que el tema común en todas estas ocasiones que he compartido es «TIEMPO».


Nuestra colaboradora Vania y su marido de paseo por el centro comercial.  Es importante planear el tiempo que pasamos con nuestra familia.  Es fácil dejar pasar el tiempo y perder oportunidades. 

Pasos Prácticos para demostrar amor a nuestra familia:

1. Priorizar las actividades para tener tiempo juntos.

Hay muchas cosas importantes que hacer en casa: organizar, limpiar, etc.  Es importante estar abiertas a dejar pasar algunas de estas cosas de vez en cuando para lograr un bien mayor. 

2. Ser intencional en organizar el tiempo juntos.

Si nos sentamos y esperamos que sea el tiempo ideal, no lo lograremos.   Muy raramente todo está perfecto a nuestro alrededor para entonces pasar tiempo juntos.  Acepta que la vida no es perfecta, pero podemos encontrar pequeñas perfecciones en los momentos vividos juntos. 

3. Tratar de entrar en el mundo los unos de los otros.

Yo soy culpable de tratar de traer a mis hijos a mi mundo de manualidades, para que así pasemos tiempo juntos.  No hay nada de malo en ello, no sea que, al mismo tiempo, no hagamos un esfuerzo intencional de interesarnos por sus mundos.  Con mi familia me encontrarás de compras con una hija mayor, viendo una peli con la otra, tratando de aprender a jugar la Play con mi hijo o tomando un café con mi marido oyéndole hablar de sus aventuras.  Son cosas diferentes pero que comunican mi amor a cada uno.  Para una visión más completa de este tema, recomiendo la lectura del libro Los 5 Lenguajes del Amor

Esperamos haber podido ayudaros.  Mañana hablamos de la paz en nuestro hogar.  Os dejamos con una foto de Vania.

Nada habla más de amor como una mesa preparada con todo el esmero para una comida de domingo en familia … aunque no vengan visitas.  El amor se demuestra por el cuidado e ilusión que ponemos en las pequeñas cosas. Vania es una «artista de la mesa», le encanta decorar la mesa para la familia.  Ya veremos más de su arte.

Mara & Vania

Deja un comentario

Este sitio utiliza Akismet para reducir el spam. Conoce cómo se procesan los datos de tus comentarios.