La belleza de la flor de maracuyá y su espectacular diseño encantaron a los Jesuitas que decidieron utilizarlas haciendo corresponder cada una de las partes de flor de la pasiflora con un cierto aspecto de la Pasión de Cristo: Los tres estigmas – los tres clavos que prendieron Jesús a la Cruz, las cinco anteras – las cinco llagas, la corona floral – la corona de espinos, las hojas palmeadas y los zarcillos simbolizaban las lanzas y los látigos de los perseguidores de Cristo y las brácteas a la Santísima Trinidad. Además, los tonos de morados de los filamentos simbolizan la sangre derramada por Jesús y son utilizados por los cristianos durante la Semana Santa.
La historia cuenta que en el siglo XVll el Papa Pablo V se quedó maravillado cuando recibió un ramo de flores de maracuyá y ordenó que fuesen cultivadas en Roma: las flores que vinieron de Sudamérica fue una señal de que el evangelio era para ser predicado también en el “Nuevo Mundo”. En la simbología cristiana, el formato redondo del fruto corresponde al mundo de pecado que Cristo entregó su vida para salvarnos. La naturaleza creada y protegida por Dios es enviada por Él para anunciarnos su amor y cuidado cariñoso a cada día: esto nos enseña este Salmo.
“Los cielos cuentan la gloria de Dios, y el firmamento proclama la obra de sus manos. Sin palabras, sin lenguaje, sin voz perceptible, por toda la tierra resuena su eco, ¡sus palabras llegan a los confines del mundo!” Salmo 19:1,3 y 4.
Y como podemos aprender ahora también lo hace con la flor de maracuyá que nos acuerda que Jesús vino murió y Resucitó para nos salvar y es nuestro camino hacía el Padre. Que el Espíritu nos ilumine y nos ayude a comprender la dimensión de la Obra de Cristo.
¿Qué os parece si hacemos y degustamos un riquísimo mousse de maracuyá? Y así acordarnos de el precioso regalo de salvación que Cristo nos dado.
Mousse de Maracuyá
El maracuyá es natural de Sudamérica siendo Brasil su mayor productor teniendo unas 150 especies. Posee un aroma tan penetrante y maravilloso que es utilizado por varias empresas famosas para crear nuevos perfumes, entre ellas Victoria´s Secret, Mary Kay, con el nombre de passion fruit. Se utiliza ampliamente en la culinaria brasileña tanto en platos dulces como platos salados. Hoy os daré una mousse muy fácil y rica que hace parte de todas las fechas festivas de mi casa.
Ingredientes: 2 maracuyás brasileños grandes o 3 medios (los hay en Alcampo); 1 Lata pequeña de leche condensada, 1 bote de nata para montar.
Para el almíbar: 2 cucharadas soperas de azúcar. Pulpa con semillas de maracuyá. 50 ml de agua.
Modo de preparo: Lavar los frutas, secar y cortar por la mitad, con una cuchara retirar la pulpa (es espesa se parece a clara de huevo), separar dos cucharas para hacer el almíbar. Batir el restante de la semilla con 100 ml de agua, colar e reservar este zumo. En la licuadora verter la leche condensada, la nata y el zumo. Batir por 3 minutos. Verter en las tarrinas, dejar enfriar en la nevera por 2 horas. Mezclar la pulpa con semillas de maracuyá con el azúcar, el agua y llevar al fuego en ebullición por 3 minutos. Dejar que se enfríe en la nevera, taparlo con papel film porque huele mucho. Servir decorado con el almíbar.
¡Os deseamos una Feliz Pascua!
Rosa