En estos días en los que pasar el rato en casa se está convirtiendo en una suerte de imaginación en su máxima expresión. También me organizo para poder disfrutar más de la lectura bíblica diaria, del estudio bíblico y las predicaciones. Debido a que vivimos en la era tecnológica, estamos entendiendo que los avances en las comunicaciones de forma instantánea, temporal y grupal pueden ser efectivas para el Evangelio. Como nos insta Pablo en la Primera Epístola a los Tesalonicenses 5:21: «Examinadlo todo, retened lo bueno».

Muchas de nosotras ya no asistimos al templo para el servicio dominical, aunque lo cierto es que la iglesia somos nosotros, la conformamos cada una de las personas que entregó su vida a Nuestro Salvador y Redentor, el Señor Cristo Jesús. Por lo tanto, nuestros pastores están acometiendo unos esfuerzos magnánimos para que tanto ellos como nosotros sigamos conociendo y aprendiendo más de nuestro amado Dios.
En este sentido me llamaron la atención unos estudios bíblicos e infografías del pastor Carl Hardmeier, desde Suiza ¿a qué no es hermoso este salmo?
Nos explicaba Carl en su estudio que en estos momentos de desaliento, pena y desasosiego por la crisis que estamos viviendo, los creyentes estamos llamados a seguir alabando a Dios, al Hacedor de la Vida. Pero nos abría el camino a las diferentes formas de alabanza práctica, partiendo de nueve significados que el pueblo de Israel le daba a esta actividad, que sobre todo tiene que partir desde nuestro corazón. En general, estamos acostumbrados a la imagen del principio de este artículo como actitud de alabanza. Por supuesto, que es una de las formas muy válidas y reconfortantes.

Los otros significados de alabar que podemos encontrar en el Antiguo Testamento se encuentran en los siguientes versículos que Carl nos iba mostrando:
- 1 Crónicas 23: 5-> Expresar sin miedo, hacer que otro brille; alabar en cualquier lugar.
- Nehemías 12:8 -> Cantos de acción de gracia.
- Deuteronomio 10:20 -> Enfocándonos en Dios y en lo que ha hecho; El es el centro.
- Isaías 45: 4 -7 -> Halagar en publico; dar títulos de honor; decir los atributos de Dios.
- Salmos 66:8 -> Tiempo tranquilo con Dios; calmar el ritmo de la vida para poder sosegarse y compartir con Dios esos momentos de quietud.
- Salmos 104:34 -> Meditar, reflexionar, compartir tu dolor con Dios, susurrar tu pena a Dios.
- Salmos 95:6 -> Arrodillarse, postrarse ante Dios, poner a su entera disposición.
- Salmos 50:23 -> Sacrificio de alabanza para honrar a Dios. Alabar a Dios en medio de las dificultades.
- Éxodo 17:11 ->Levantar las manos buscando ayuda y protección. También se podría entender que lo hacemos reconociendo el pecado con la intención de sacarlo hacia afuera.
Todos estos versículos queridas amigas me han ayudado para comprender las muchas maneras en las que puedo alabar a Dios a lo largo del día, sobre todo, en esta época, marzo 2020, del confinamiento en Madrid, debido a la alerta sanitaria.
Apliquemos estos otros significados en nuestras alabanzas privadas, particulares o familiares.
Un fuerte abrazo, #YoMeQuedoEnCasa
Nilda